Grand Theft Auto es una saga que daría paso a un nuevo concepto de juego, la libertad de acción, y también una de las más famosas en el mundo videojueguil. En 1997, nadie hubiese imaginado que un juego te pudiese meter en la piel de un criminal, el cual podría desplazarse libremente por la ciudad de Londres creando el caos más absoluto y realizando acciones de lo más atroces. Pues bien, el primer GTA lo consiguió, y a pesar de no contar con unos gráficos medianamente decentes y de no recibir críticas que lo colocase a la altura de las siguientes entregas de esta prestigiosa serie, supo abrirse un hueco entre la lista de los más vendidos, y además innovando en el género de forma radical, teniendo una gran repercusión en el mismo. El de la secuela de esta producción, era un planteamiento calco al de su predecesor, aunque se habían añadido algunos elementos exclusivos de esta segunda parte. Pero donde la saga dio el salto que la impulsaría hacia el Olimpo de los videojuegos sería en su tercera entrega, que aparecería para PS2, PC y Xbox (en esta última con un pack conjunto con el juego analizado), y donde se notaba un acabado gráfico donde seapreciaba una mejoría muy notable, debido al cambio de las 2D a las 3D. Además, no sólo percibíamos cambios a nivel técnico, también la jugabilidad se hacía ver más amena e interesante. Un año después de este superéxito, Rockstar volvió a estos lares con Vice City, donde quizás no se innovaba tanto como en GTA III, pero si se hacia más hincapié y se profundizaba más en la interfaz del juego. Tras haber alcanzado la impresionante cifra de 24 millones de copias vendidas desde que la serie arraigó en 1997 hasta finales de 2004 (poco después del lanzamiento de la quinta y hasta ahora última entrega, San Andreas), GTA se coronaba como una de las franquicias clave en el mundo de los videojuegos, y VC tuvo en gran parte la culpa de este suceso, puesto que alcanzó la friolera de casi 8 millones de copias vendidas en dos años escasos, y fue uno de los títulos que más dio que hablar a finales de 2002. Y tras esta introducción, os estaréis preguntando: ¿A santo de qué viene un análisis sobre un juego que ha salido a la venta hace más de tres años y del que ya está todo dicho, además de haber ya dos críticas en la base de datos de Viciojuegos.com? Bueno, digamos que ha este usuario le ha dado por hacer una especie de homenaje a un GTA que dejó un sello indeleble entre todos los jugones, y nunca está de más recordar grandes éxitos pasados. Y si lo creéis conocer todo sobre este juego o no queréis saber más sobre él, os recomendamos que dejéis de leer el análisis, porque estaríais echando a perder vuestro propio tiempo y el de este redactor. Sin más preámbulos, nos disponemos a analizar el juego en sí, no sin antes explicar el argumento. La trama de este videojuego no tiene demasiadas complicaciones, vamos, un argumento sencillito para una gran aventura. Nos situamos en el año 1986 en Vice City, una ciudad movidita donde el crimen, la mafia y la corrupción se adueñan de las calles. Asumimos el papel de Tommy Vercetty, un criminal que acaba de volver de Liberty City, donde ocurrían los hechos de GTA III. Nuestro colega Tommy tiene que realizar un encarguito para Sony Forelli, su jefe, intercambiar un cargamento de droga por una gran suma de dinero. Todo parece ir sobre ruedas, hasta que el protagonista se percata de que es una trampa tendida a manos de la mafia colombiana, y los saboteadores se agencian la pasta y la droga. A Forelli no parece gustarle lo ocurrido, y le dice a Vercetty que o recupera el dinero o es picadillo. Ahí es donde empezará nuestro viaje a lo largo y ancho de la ciudad, realizando todo tipo de encarguitos para los tipos más estrafalarios que os podáis imaginar. También conoceremos a otros personajes como Avery Carrington, el general Cortez, Candy Suxx o Ken Rosemberg entre muchos otros. Una de las facetas de las que carecía el protagonista de GTAIII era personalidad. Tal y como lo oís, quizás no sea la mejor manera de expresarlo, pero con esto nos referimos que ese personaje no hablaba, en ningún momento se menciona su nombre y básicamente se dedicaba a cumplir encarguitos como un buen matón. Pues todo eso se acabo, puesto que en esta secuela nuestro amigo Tommy Vercetty es un capo de la mafia de los pies a la cabeza, con nombre y apellido, y además, estará encarnado perfectamente por Ray Liota, quien presta su voz a este peculiar personaje. No estamos hablando de un protagonista carismático como el que más, pero si de uno que tiene un toque personal. Haciendo una descripción de Vercetty a groso modo, podemos decir que es un hombre atípico, no se preocupa por nada ni por nadie, simplemente por conservar su propio pellejo, y que se toma las situaciones problemáticas con relativa calma. Además, siempre se toma la libertad de añadir un poco de humor y sarcasmo en las misiones para animar la fiesta. Un personaje con estilo propio.
martes, 15 de septiembre de 2009
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